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Marsella en tres días
Itinerario recomendado para ver Marsella en 3 días:

Día 1:
– Viejo puerto. Fuerte de Saint James, Abadía de San Víctor, Fuerte San Nicolás, ayuntamiento…
Le Panier / La Vieille Charité.
– Basílica de Notre Dame de la Gare.
Día 2:
– Catedral de Sainte Marie Majeur.
– Palacio Longchamp.
– Le Canebière.
– Palacio de Faro / La Corniche.
(ver itinerario detallado en Marsella en 1 día y Marsella en 2 días)
Disponiendo de tres días en la ciudad, tendrás oportunidad de disfrutar de la noche de Marsella (al menos una). Da un paseo nocturno por el puerto viejo y elige entre los numerosos pubs, restaurantes, terrazas y discotecas la opción que más se adapte a tus preferencia. Otra posibilidad es asistir a algunas de las representaciones que tienen lugar en el Teatro Nacional de Marsella (La Criée), en lo que fuera el antiguo mercado donde se celebraba la subasta diaria del pescado que llegaba al puerto.
Día 3:
– Castillo de If. (2 horas y 30 minutos). Desde el quai de la Fraternité, en el puerto viejo, puedes coger uno de los barcos que salen hacia el islote de If, donde está el castillo en el que estuvo encarcelado, según la novela de Alejandro Dumas, el conde de Montecristo. Disfruta del Mediterráneo y descubre los secretos de la misteriosa prisión. Tiempo de la travesía, 25 minutos por trayecto.
– Museo de la Moda. (1 hora) De regreso al puerto y subiendo por la emblemática calle Le Canebière, tienes, en el número 11, este museo que, estando en Francia, no te deberías perder. Más de 4.000 trajes, complementos y accesorios de los grandes diseñadores cuyas colecciones han roto moldes.

– Los comercios de la Butte. La zona de la plaza Cours Julien y Notre Dame du Mont fueron el lugar en el que tenía lugar el mercado mayorista de Marsella hasta 1972. Hoy, los antiguos almacenes y comercios aledaños están ocupados por galerías de arte, boutiques exclusivas, tiendas donde exponen los jóvenes diseñadores, pequeños talleres artesanos (por ejemplo fabricantes de jabones) librerías… Es la zona que se conoce como la Butte y descubrir sus calles y plazas llenas de terrazas y cafeterías es una delicia. Además, es un lugar perfecto y original para hacer (de momento) tus últimas compras. Es un barrio muy céntrico, detrás del puerto viejo y cerca de Le Canebière pero si lo prefieres, puedes coger el metro, línea 2, hasta la estación de Notre Dame du Mont.