Le Panier es el barrio antiguo de Marsella, pintoresco, dinámico y multicultural. Un paseo por sus laberínticas calles permiten conocer la esencia de esta ciudad portuaria cuya historia resulta apasionante. Le Panier “sube” desde el puerto viejo por la suave colina hasta la zona alta, donde en el siglo III antes de Cristo estuvo el ágora griega. Por el camino, se suceden antiguas casas de pescadores y estibadores, junto a edificios singulares como la Casa del Diamante, palacio del siglo XVI, cuya fachada está decorada con piedras talladas en forma de pirámide que recuerdan a la piedra preciosa.
En los últimos años, el barrio ha experimentado una profunda transformación tras haber permanecido en la década de los 60 en un cierto abandono que le valió fama de zona poco recomendable. Tras la segunda guerra mundial (y los duros bombardeos sufridos) fueron muchos los emigrantes que llegaron procedentes de distintos lugares con especial presencia de corsos y napolitanos, pero también desde otros continentes . Ese mestizaje es, tal vez, el que ha dado a Le Panier un ambiente único y particular. A las antiguas casas, de paredes ocres, han vuelto artesanos y artistas y han dado un nuevo aire al barrio más especial de Marsella.
Haz el recorrido a pie, perdiéndote por las callejuelas, cuestas y escaleras y parándote en las coquetas plazas que encontrarás en tu camino. Puedes iniciar el ascenso por la subida des Accoules, más que una calle, una “rampa” medieval que cuenta en el centro con una barra que ayuda en la subida. Desde aquí, déjate sorprender por el ambiente y por algunos de los puntos más interesantes de Le Panier: el Hotêl Daviel, antiguo palacio de justicia en la rue Coisserie, la encantadora Plaza Lenche, desde la que tendrás una espléndida vista del puerto, el campanario de Accoules y el Hotel Diue, antiguo hospital de la ciudad.
El barrio tiene una animación constante de día y de noche. Junto a los talleres de artesanos, alfareros muchos de ellos dedicados a hacer las tradicionales figuritas del Belén, encontrarás numerosos bares, cafeterías y agradables terrazas, en bonitas plazas como la de Los Molinos o la Plaza Treize Cantons, desde la que ya verás, a lo lejos, el que es sin duda el monumento más destacado de Le Panier: la Vieille Charité.
Se trata de un espléndido edificio del siglo XVI, obra del arquitecto Pierre Puget, dedicado durante siglos a atender a los más necesitados de la ciudad. También funcionó como hospicio y, en la actualidad, es un espacio multicultural, sede de dos importantes museos: el Museo de Arqueología del Mediterráneo y el Museo de Artes Africanas Oceánicas y Amerindias. La “Vieja Caridad” es un edificio formado por cuatro pabellones que se distribuyen alrededor de un patio en cuyo centro se alza una hermosa capilla que llama la atención por su cúpula ovalada. Cada una de las cuatro alas se divide en tres niveles y la fachada que da al patio forma una bonita y armoniosa triple arcada. El edificio acoge, también, otras instituciones como el Centro Internacional de Poesía de Marsella, el Centro Nacional de Investigaciones Científicas o la sala de cine alternativo Le Miroir.
Horario y cómo llegar a la Vieille Charité
Puedes visitarlo todos los días de 10:00 a 17:00 (del 1 de octubre al 31 de mayo) y de 11:00 a 18:00 (del 1 de junio al 30 de septiembre).
La dirección exacta es 2, rue de la Charité.
Puedes a pie, recorriendo el barrio Le Panier o en el metro, línea 2, estación Joliette.
Foto: jean-louis zimmermann