En lo alto de una meseta rocosa que se eleva en un extremo del puerto viejo se alza el Palacio del Faro (Pharo), un espléndida construcción del siglo XIX, mandada a construir por Napoleón III como vivienda para él y la emperatriz Eugenia (aunque él nunca llegó a habitarlo).
En los inicios del siglo XX fue sede de la Escuela de Medicina de Marsella y, actualmente, está dedicado a la celebración de congresos y eventos profesionales.
Puedes contemplar la fachada elegante y clásica de este hermoso conjunto arquitectónico, pero seguro que lo que más te impresionará son las vistas que tendrás desde el jardín que lo rodea. Se cree que el nombre de Palacio del Faro viene dado porque en esta agreste atalaya existía, en el siglo XIV, un faro que orientaba a marinos y navegantes. Estando aquí, entenderás que la ubicación no podía ser mejor. La panorámica del mar y de toda la costa norte de Marsella es fantástica y, sin perder la vista tan lejos, la perspectiva del viejo puerto, con su trasiego de barcos, los fuertes que protegen la entrada (San Nicolás, el que verás muy cerca y el Fuerte Saint Jean), la catedral… merece la pena llevarte esta “postal” a casa.
Ubicación, horario y cómo llegar hasta el Palacio del Faro
La dirección del palacio es: Boulevard Charles Livon, 58.
Los autobuses que llegan hasta aquí son el 81 y el 83 (puedes cogerlo, entre otos puntos en el mismo Hôtel de Ville).
A la zona puedes acercarte en cualquier momento, pero el parque que rodea el palacio está abierto todos los días en horario de 08:00 a 21:00.
Foto: Marc DUPUY